La menopausia en la provincia de Alicante cambia y comienza a disfrutarse de “La Segunda etapa de la Mujer Adulta” englobando a las mujeres que se encuentran tras la menopausia o próxima a ella.
Durante la segunda etapa de la edad adulta, entre los 40 y los 60 años, los procesos biofisiológicos de envejecimiento comienzan a hacerse más patentes, llevando a menudo a las personas a reevaluar y redefinir su imagen corporal sexuada, no sólo en lo concerniente a su aspecto sino también a lo referido a sus posibilidades. En lo que se refiere a la esfera psicosocial, en esta segunda etapa de la vida adulta la toma de conciencia de la temporalidad de la vida, favorece el que la mayor parte de las personas comiencen a hacer un balance de sus vidas y a reevaluarlas en función de las metas y logros alcanzados, tanto desde el punto de vista familiar como profesional y social. Sin duda, las diferentes formas de vivir y afrontar los cambios corporales así como los diferentes resultados del balance de experiencias vitales y las readaptaciones que cada persona haya de realizar a partir de ellos, introducirán importantes variaciones en la forma de vivir la sexualidad de este período.
De este modo, según Fuertes, A. y López, F. (1994), “las intervenciones encaminadas a promover el desarrollo sexual como a prevenir la aparición de posibles problemas sexuales a lo largo de la segunda etapa de la vida adulta van encaminadas a incrementar el control que las personas puedan tener sobre factores determinantes de la salud sexual”. Tras la menopausia la vida sexual continúa pero es distinta, cambian las necesidades, las respuestas fisiológicas, etc. y para ello la mujer necesita aprender de nuevo a vivir de otra forma su sexualidad, lo que requiere un nuevo marco de actuación capaz de readaptarse a los cambios físicos y psicológicos, y comenzar a descubrir las nuevas posibilidades. Se dará respuesta profesional a las demandas de las usuarias, volviendo a estimular el deseo sexual y favoreciendo el desarrollo normalizado de las relaciones sexuales.
Para empezar, siempre antes del curso se realiza una sesión informativa donde todas las mujeres interesadas en realizarlo asisten y se detalla su contenido, intentando que mujeres de cursos antiguos nos cuenten su experiencia.
El curso en sí consiste en 5 clases teóricas, donde aprenderán a romper con prejuicios que pueden encontrarse, desde la reflexión y la comparación con otras culturas. Conociendo sus derechos asertivos, de expresión y de respeto mutuo, fortaleciendo lazos en la pareja y en el ambiente familiar. Reflexionando sobre aspectos de la propia vida de cada persona y conociendo lo que a nivel físico, psicológico y social conlleva la segunda etapa de la mujer adulta, con indicaciones y recomendaciones para poder vivir esta estupenda etapa. Y 5 clases prácticas, donde practicarán lo aprendido mediante rol playing, ejercicios de relajación, de descubrimiento del resto de las personas compañeras, el verse en el espejo de forma diferente, a reír y sentirse en libertad, a sentirse más querida y más cercana al resto de sus seres queridos, así como a remediar la falta de deseo uno de los problemas sexuales más comunes durante ésta etapa. Nos gusta destacar la importancia que tiene este curso por haber sido diseñado por David Mellado, considerado uno de los mejores sexólogos de España.
La sesión informativa inicial para las interesadas y las 10 sesiones más del curso, constan de 90 minutos de duración cada una. Cada curso dispone de 15 plazas para alumnas con absolutamente todos los materiales incluidos y una pequeña campaña de difusión.
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Hasta ahora siempre desarrollado en la provincia de Alicante, La Segunda etapa de la Mujer Adulta enseña a las participantes cómo tratar los trastornos propios de la menopausia. No se trata de un reemplazo hormonal, cuando los estrógenos hacen de las suyas y aparecen los primeros bochornos y sofocos, no utilices tratamientos hormonales sustitutivos llenos de efectos secundarios. No todo va a ser aprender a controlar los desvaríos de la libido y reírse, además del cese de la menstruación, en este proceso biológico comenzamos a notar sequedad vaginal y otros síntomas propios del desajuste hormonal. Óvulos y ovarios. Mejorar la higiene íntima siempre suele aliviar los síntomas pero cambiar malos hábitos o adquirir nuevos comportamientos es la clave también del éxito. Además el experto responde a las dudas que se planteen en el aula. La edad mínima de acceso estimamos que son los cuarenta años porque la mayoría de las mujeres sobre esta edad experimentan los efectos de la premenopausia o perimenopausia, no obstante en casos de menopausia precoz puede hacerse una excepción.