Ganan terreno: las copas menstruales llegan al supermercado.
Estos días nos han hecho llegar estas imágenes de copas menstruales en venta en un reconocido supermercado extendido por toda la geografía española. En nuestra lucha por la normalización y accesibilidad de la copa menstrual, hoy celebramos un gran logro: la copa menstrual se comercializa también en supermercados, junto con sus tradicionales competidores, si es que se les puede llamar así. Para nosotras, como asociación que ha dedicado años a la promoción de este método de higiene menstrual, este hito representa un avance fundamental en el acceso y promoción de productos más sostenibles y saludables para las mujeres.
Hace años, cuando comenzamos a promover los beneficios de la copa menstrual, hablar de ella era casi un acto de rebeldía. La falta de información, los tabúes sociales y la escasez de puntos de venta hacían que hacerse con una fuese un reto considerable. En aquel entonces, encontrar una copa menstrual era una tarea complicada: había que buscar tiendas especializadas, en muchos casos, solo accesibles por internet. Además, existía un desconocimiento generalizado sobre su uso, lo que dificultaba aún más su introducción en el mercado.
Afortunadamente, los tiempos han cambiado. La creciente demanda y la conciencia sobre la necesidad de alternativas más sostenibles en productos de higiene personal han permitido que hoy en día la copa menstrual esté cada vez más disponible, incluso en grandes superficies. Que una cadena de supermercados, accesible a todo el público, comience a vender copas menstruales significa que hemos logrado romper barreras y acercar este método a muchas más mujeres. Esto es motivo de celebración, no solo para nosotras como asociación, sino para todas aquellas personas que han apostado por alternativas más ecológicas, saludables y económicas.
A lo largo de los años, hemos insistido en los múltiples beneficios que la copa menstrual ofrece en comparación con otros productos como tampones y compresas. A continuación, resumimos las principales ventajas de la copa menstrual:
1. Sostenibilidad y respeto al medio ambiente:
Una copa menstrual puede durar hasta 5 años si se cuida adecuadamente, lo que reduce considerablemente el impacto ambiental en comparación con los productos desechables como tampones y compresas. Se estima que de media una mujer utiliza alrededor de 11,000 productos desechables a lo largo de su vida, mientras que con una copa menstrual se reduce drásticamente la cantidad de desechos generados.
2. Ahorro económico:
Aunque la copa menstrual tiene un costo inicial más elevado que un paquete de compresas o tampones, a largo plazo resulta mucho más económica. Siempre hemos recomendado la marca Intimina con un precio que ronda los 32€, las hay más baratas aunque desconocemos su calidad. Como se mencionó antes, su durabilidad permite que no sea necesario gastar en productos de higiene cada mes, lo que supone un importante ahorro para las usuarias.
3. Salud y comodidad:
La copa menstrual está hecha de silicona médica, un material hipoalergénico y seguro que reduce el riesgo de infecciones, irritaciones y alergias que a menudo se asocian con los tampones y las compresas. Además, la copa no altera el equilibrio natural de la flora vaginal, como sí pueden hacerlo otros métodos. A diferencia de los tampones, no está asociada al síndrome de shock tóxico.
4. Mayor capacidad y comodidad a largo plazo:
Las copas menstruales pueden retener más líquido que un tampón o una compresa, lo que permite llevarlas puestas hasta 12 horas (o incluso más) sin necesidad de cambiarla constantemente. Esto resulta especialmente beneficioso durante los días de flujo abundante, además de proporcionar mayor comodidad y libertad para realizar actividades diarias o deportes sin preocuparse por fugas.
5. Empoderamiento y autoconocimiento:
El uso de la copa menstrual promueve el autoconocimiento del propio cuerpo. Al manipular la copa, las mujeres que la utilizan desarrollan una mayor conexión con su ciclo menstrual, lo que puede ayudar a desmitificar la menstruación y contribuir a una relación más positiva y natural con el cuerpo, así como a conocer mejor el propio cuerpo.
Que las copas menstruales lleguen a los supermercados es, sin duda, un paso hacia la normalización de su uso. Este avance nos impulsa a seguir trabajando para que cada vez más personas conozcan esta opción, y que aquellas que ya la usan puedan adquirirla de manera más sencilla y accesible. Seguiremos promoviendo su uso, con el firme convencimiento de que la copa menstrual es una solución más sostenible, económica y saludable para la higiene femenina.
